¿Sus muebles de exterior, su veranda o su revestimiento de madera requieren un cuidado especial? ¿Y quiere mantener su buen aspecto durante todo el año? La mejor solución a este problema es la pintura. Hoy en día, existen varios tipos de pinturas para madera de exterior. Para evitar sorpresas desagradables, la elección debe hacerse con cuidado. ¡Consigaa ssus pinceles!

¿Qué pintura debe elegir para su madera exterior?

¿Se está agrietando la pintura de sus contraventanas, ventanas, paneles de jardín, muebles de jardín, revestimientos y casetas de jardín? De hecho, es muy posible que el color se haya desvanecido, ya que estos soportes de madera están sometidos a las agresiones climáticas. Por supuesto, la madera tiende a encanecer con el tiempo. La mejor manera de darle un nuevo brillo y una nueva vida es, sin duda, aplicar una pintura especial para madera de exterior. Para su información, estas pinturas especiales refuerzan y protegen la madera exterior contra los insectos y la humedad. Además de reforzar la madera, esta pintura ofrece una protección óptima contra los rayos UV y, sobre todo, contra la intemperie. Con esta pintura, puede dar un nuevo aspecto a sus viejos muebles. Por un lado, las pinturas para madera se distinguen indiscutiblemente por su característica micro porosa, que permite que la madera respire evitando la infiltración de agua, y ello sin empañar la pintura. Como la madera es un material vivo, tiende a dilatarse y contraerse en función de las condiciones meteorológicas. Por esta razón, los fabricantes han desarrollado una consistencia especial para la pintura que puede seguir el movimiento de la madera. Gracias a su consistencia elástica, la pintura no se desprende y no está sujeta a diversos ataques. Siga este enlace para obtener más información: www.exterieurdesign.fr.

Criterios para elegir la pintura de madera para exteriores

Antes de apresurarse a elegir una pintura para madera de exterior, le recomendamos encarecidamente que tenga en cuenta ciertos criterios, concretamente el tipo de superficie. Realizar un diagnóstico de la superficie permite analizar el tipo de superficie y elegir el producto más adecuado para ella. Además, analizando su sustrato de madera, podrá descubrir los preparativos necesarios que hay que hacer. En primer lugar, hay que saber cómo es la superficie. ¿Es nuevo o viejo? ¿Pintado o manchado? Si la madera es nueva, es fundamental aplicar una capa de fondo para que la pintura se adhiera mejor. Si la madera está pintada, bastará con lijar. Sin embargo, si la superficie está manchada, deberá lijar la superficie o elegir una nueva pintura de última generación antes de aplicar el acabado. Si la pintura vieja está dañada o sucia, lo mejor es tratar y limpiar las zonas que necesitan mantenimiento. Si hay agujeros, intente llenarlos. Puede utilizar revestimientos específicos para alisar la superficie. Tenga en cuenta que la pintura que elija depende en gran medida del tipo de madera. Por ejemplo, si su invernadero es de teca o de madera ácida, debe elegir una capa de fondo especial.

Los diferentes tipos de pintura de madera para exteriores

Dependiendo de sus necesidades, hay varias opciones. En la actualidad existen pinturas al agua y pinturas al aceite. La pintura acrílica, de base acuosa, es perfecta para facilitar la respiración de la madera, sobre todo por su calidad microporosa. Además, este tipo de pintura tiende a secarse rápidamente y es respetuosa con el medio ambiente, ya que contiene pocos compuestos orgánicos volátiles. A continuación, la pintura alquídica. En cambio, la pintura alquídica es más duradera y tiene un mejor acabado que la acrílica. Puede limpiar todos los elementos de la pintura con agua, por supuesto. La pintura gliceroftálica es una pintura al aceite especialmente resistente a los rayos UV, a los impactos y, sobre todo, al moho y la humedad. Por otro lado, requiere un largo tiempo de secado y emite un olor desagradable. Además, necesitará White Spirit para diluirlo.

¿Qué productos deben utilizarse para proteger y mantener la madera exterior?

Dado que la madera es un material vivo, está obviamente sometida a los elementos, como el viento, el sol, la lluvia y la nieve. Los hongos y los insectos también dañan una instalación de madera. Aunque la madera tiene una gran resistencia y durabilidad, se deteriora con el tiempo. Para mantenerlo en las mismas condiciones que antes, es imprescindible realizar un mantenimiento regular adoptando productos específicos.