La barbacoa es actualmente uno de los electrodomésticos imprescindibles durante el verano para disfrutar de las comidas de convivencia. Tanto si vive en un piso con balcón como en una casa con jardín, hay varios tamaños y modelos de barbacoa disponibles para que disfrute de su velada. ¿Acaba de comprar una barbacoa o una parrilla de carne y le gustaría mejorar su vida útil? Entonces, hay que mantenerlo de forma adecuada y regular. Hagamos un balance.

Buenas razones para mantener regularmente su barbacoa

Como cualquier otro electrodoméstico, el mantenimiento de una barbacoa garantiza su vida útil. Tanto la barbacoa como la parrilla de carne requieren un mantenimiento especial. En efecto, al estar la barbacoa llena de grasa, el equipo puede presentar un humo desagradable. Por no hablar de los residuos carbonizados que se depositan en las placas o en el tanque. Tenga en cuenta que estos residuos no hacen más que deteriorar el aparato y provocar su mal funcionamiento. Por último, el óxido y, sobre todo, el polvo que se acumula entre un uso y otro pueden ser perjudiciales. Para obtener un sabor excepcional y al mismo tiempo preservar su salud, lo ideal sería remangarse fácilmente y mantener su barbacoa con regularidad. El mejor momento para hacerlo es antes del verano, antes de guardarlo en invierno y después de cada uso. Para más información, siga este enlace: www.escapades-interieures.fr Para limpiar la superficie exterior, protéjase las manos con guantes y utilice un paño suave empapado en agua jabonosa. También puede optar por un líquido de pH neutro o por productos especiales diseñados para eliminar la grasa de las parrillas. Puede encontrar estos productos en tiendas de bricolaje o supermercados.

¿Cómo puedo limpiar bien las parrillas?

Dependiendo del material de diseño de la barbacoa, algunos modelos parecen vulnerables a la oxidación y la corrosión. Por eso, si elige un modelo de mala calidad, no es raro que su electrodoméstico esté siempre mojado y es probable que se empañe en poco tiempo. Ante una barbacoa oxidada, hay varias soluciones posibles. En primer lugar, puede optar específicamente por el jabón negro o el aceite de linaza. Para ello, utilice un paño y empápelo en este producto para limpiar las placas. También puede utilizar una esponja mojada en una mezcla de limón y sal. Esta opción permite eliminar el óxido. En cualquier caso, destierre inmediatamente los productos químicos, ya que pueden crear otros problemas al tiempo que ensucian su barbacoa. Por último, no olvide aclarar y secar todo antes de guardarlo.

¿Y la limpieza de la taza?

Además de la parrilla, también debe limpiar el recipiente para que la cocción sea correcta y el sabor de los alimentos sea excepcional. Para esta tarea, es imprescindible esperar a que las cenizas estén perfectamente frías antes de retirarlas. A continuación, se recomienda preparar una mezcla de agua caliente y detergente. Con esta solución puede limpiar el interior de su barbacoa con un paño de microfibra. Por último, aclare bien el recipiente. Antes de apresurarse a guardar su equipo al final de la temporada, es muy recomendable limpiarlo por última vez. Esto significa que debe mantener tanto los quemadores como el tanque. Para mantener su aparato en buen estado, está obligado a mantenerlo tan limpio como en el pasado. Además, si ha invertido en un aparato móvil, es mejor guardarlo en el garaje o en el sótano. En el caso de los tipos no transportables, tendrá la opción de aparcarlo en su cubierta específica para preservarlo contra los elementos. Esta funda ya está disponible en las tiendas de bricolaje.

Para el mantenimiento a largo plazo

Cuanto más regular y correctamente mantenga su barbacoa, más durará su equipo y más cómodo será su uso. Por ello, para mejorar este mantenimiento, a la hora de limpiar su barbacoa, puede elegir entre una gran variedad de métodos para eliminar la suciedad y los residuos que se estancan en el aparato. Existen productos en el mercado para limpiar la barbacoa. Antes de cada uso, es importante averiguar cuáles son los que hay que utilizar para evitar sorpresas desagradables. Además, no descuide la etapa de enjuague y secado para que su barbacoa quede perfectamente seca y utilizable de nuevo. De esta manera, su dispositivo no correrá el riesgo de la humedad. Lo mismo ocurre con la cubierta protectora para proteger su equipo de la lluvia, el sol y la nieve.